miércoles, 26 de diciembre de 2007

La angustia de las influencias

El polémico Harold Bloom, el último de los deconstruccionistas norteamericanos, se ha encargado de estudiar la tradición poética en lengua inglesa. Para dar cuenta de la problemática que lo obsesiona, Bloom elaboró una sofisticada teoría revisionista, de acuerdo a la cual “los poetas modernos padecen de ansiedad de influencias” o sentido de “haber llegado tarde” a la historia, lo que los inhabilita para crear, a menos que realicen un “asesinato simbólico” de sus precursores a través de una “lectura desviada” o malinterpretación.
A continuación, una breve exposición de su teoría:


Los poetas, como poetas, y en especial los poetas fuertes, vuelven a sus orígenes al final [de sus vidas], o cuando sienten la inminencia del final. Los críticos pueden estar atentos a los orígenes, o abandonarlos con desdén a los carroñeros de la erudición, los cazadores de fuentes, pero el poeta-como-poeta está desesperadamente obsesionado con los orígenes poéticos, en general a pesar de sí mismos, como la persona-como-persona se obsesiona, en última instancia, con sus orígenes personales (…)

Quiero reducir mi argumentación a su forma más simplificada: lo poemas, afirmo, no tratan de “temas” ni de “sí mismos”. Necesariamente tratan de otros poemas; un poema es una respuesta a un poema, así como un poeta es una respuesta a un poeta, o una persona a su padre. Tratar de escribir un poema proyecta al poeta a los orígenes de lo que un poema fue para él en primer lugar, y por lo tanto lo proyecta más allá del principio de placer a un encuentro inicial decisivo y a una respuesta que comenzó con él. Sólo un poeta desafía a un poeta como poeta, y así sólo un poeta hace a un poeta. Para el porta-como-poeta, un poema es siempre el otro, el precursor, y por ello un poema es siempre una persona, siempre el padre del segundo nacimiento. Para vivir, el poeta debe interpretar erróneamente (misinterpret) al padre, por este acto crucial que es el de rescribirlo.
HAROLD BLOOM, A map of misreading